Una cebra sedada es levantada por un helicóptero en un rancho de Texas llamado Sexy Whitetails, cerca de San Angelo. La cebra es uno de, aproximadamente, un millón de animales exóticos que habitan en los ranchos en todo el estado. Los animales se compran, venden y comercializan con frecuencia entre los ranchos. Muchos están disponibles para que los cazadores los maten, a precios elevados.FOTOGRAFÍA DE MÉLANIE WENGER, NATIONAL GEOGRAPHIC
Luego de que los clientes de Kayabuki Tavern, en Utsonomiya, Japón, terminaron de comer, los monos suben a un escenario improvisado en la parte trasera del restaurante y modelan obedientemente una colección de máscaras de papel maché. Considerados mensajeros de los dioses, muchos macacos ahora están entrenados para usar disfraces, hacer volteretas hacia atrás y caminar sobre zancos para complacer a la multitud.FOTOGRAFÍA DE JASPER DOEST
Los osos pardos pescan salmón en las cataratas McNeil de Alaska, hogar de una de las congregaciones estacionales de los osos más grandes de la Tierra. Hasta 80 se han visto a la vez en este lugar. Los osos están acostumbrados a pequeños grupos de turistas, que se acercan a la zona para observarlos. Una mina propuesta en la región amenazaría el corredor migratorio de los osos.FOTOGRAFÍA DE ACACIA JOHNSON, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un enjambre de langostas desciende sobre las acacias en el norte de Kenia en abril. Los enjambres pueden aumentar a 70 mil millones de insectos, lo suficiente para cubrir la ciudad de Nueva York 1,5 veces y diezmar 136 millones de kilos de cultivos en un solo día.FOTOGRAFÍA DE DAVID CHANCELLOR, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un león marino sudamericano nada frente a la Isla de los Estados, en la parte argentina de Tierra del Fuego. El proyecto Pristine Seas, encabezado por la National Geographic Society, tiene como objetivo proteger un tercio del océano del mundo.FOTOGRAFÍA DE ENRIC SALA
Maine fue pionera en la remoción de represas para restaurar los recorridos del salmón. Ahora, millones de peces, entre ellos las pinchaguas, una especie de arenque de río de unas 25,4 centímetros de largo, están nadando río arriba de nuevo para desovar en Highland Lake, cerca de Portland, Maine.FOTOGRAFÍA DE BRIAN SKERRY, NATIONAL GEOGRAPHIC
Con lenguas tubulares, las abejas occidentales de Langen, Alemania, beben agua para llevarla de regreso a su nido. Lo pasarán a otro grupo de abejas, que lo ayudarán a evaporarse en un proceso especial para mantener fresco el nido.FOTOGRAFÍA DEINGO ARNDT
Una sábana llena de luz en las montañas Chiricahua de Arizona está dominada por grandes polillas esfinge de líneas blancas y chinches apestosas verdes. El ecologista Lee Dyer, que coloca trampas de luz para monitorear las poblaciones de insectos, dice que en años pasados, esta trampa capturaba muchos más insectos raros.FOTOGRAFÍA DE DAVID LIITTSCHWAGER, NATIONAL GEOGRAPHIC
Los galgos para carreras deambulan por una perrera en Florida. Aunque generalmente son amables y no agresivos, los perros a menudo usan bozales entre sí porque tienen la piel delgada y pueden volverse competitivos, habiendo sido entrenados para correr detrás del mismo señuelo. Los floridanos votaron en el 2018 para prohibir las carreras de galgos para fines de 2020, poniendo fin a la industria. Los críticos del deporte sostienen que las carreras de perros son crueles, pero los de la industria lamentan la pérdida de lo que dicen que es una institución cultural.FOTOGRAFÍA DE ERIKA LARSEN, NATIONAL GEOGRAPHIC
Alrededor de algunas aldeas del oeste de Uganda, pequeños grupos de chimpancés deben sobrevivir en franjas remanentes y parches de bosque. Privados de alimentos silvestres, los chimpancés emergen para asaltar cultivos y árboles frutales cultivados, compitiendo desesperadamente con la gente por sustento, espacio y supervivencia. En julio de 2014, un chimpancé grande secuestró y mató a un niño pequeño frente a la casa de su familia, que se ve aquí, en la aldea de Kyamajaka. Con el tiempo, los chimpancés volvieron a acechar alrededor de la casa, representando una amenaza para los otros niños.FOTOGRAFÍA DE RONAN DONOVAN, NATIONAL GEOGRAPHIC
Merel Doest se agacha para cubrirse después de que Dollie, una paloma, pasó volando junto a ella en el balcón de su familia en los Países Bajos. El padre de Merel, Jasper, comenzó a fotografiar a Dollie y a su compañero Ollie mientras estaban en cuarentena en casa en marzo. Las palomas pronto se volvieron lo suficientemente audaces como para comenzar a explorar el departamento de la familia, posándose en sus platos y en el sofá de la sala.FOTOGRAFÍA DE JASPER DOEST
Bob, un flamenco, se da un baño nocturno en la piscina de agua salada detrás de la casa de su salvadora Odette Doest, en Curazao. Después de estrellarse contra la ventana de un hotel en el 2016, lo que le provocó una conmoción cerebral y lesionó el ala izquierda, no pudo regresar a la naturaleza. Es uno de los 90 animales del santuario de Doest y se ha convertido en un símbolo de conservación. Doest lo lleva a visitar escuelas como una forma de educar a los niños sobre la protección de la vida silvestre.FOTOGRAFÍA DE JASPER DOEST
Las luciérnagas conocidas como “sincronizadoras rápidas” iluminan las tierras bajas del Parque Nacional Congaree de Carolina del Sur en mayo de cada año, creando una exhibición pulsante con sus destellos coordinados de fuego rápido. David Shelley, biólogo del parque, considera a las criaturas como una “micro-fauna carismática” que sirve como recordatorio de la importancia de los insectos.FOTOGRAFÍA DE MAC STONE, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un oryx árabe sedado en un remolque en 777 Ranch en Texas espera ser transportado a otra instalación. Extintos en la naturaleza, los oryxes árabes se crían, compran y venden en muchos ranchos de Texas. Michael Rann, sobrino del dueño del rancho, cuida a los 6.000 animales del rancho. Aunque Rann dice que se da cuenta de que las tarifas de caza son la principal fuente de ingresos del rancho, perder animales en manos de los cazadores puede ser doloroso. «Ojalá no dispararan a los animales que crié», dice. «Pero es lo que es. Sé en qué trabajo».FOTOGRAFÍA DE MÉLANIE WENGER, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un águila arpía proporciona un armadillo recién matado como comida para su polluelo hambriento en la Amazonía brasileña. Desde el siglo XIX, su distribución en América Central y del Sur ha disminuido en más del 40 por ciento. Los científicos están monitoreando este nido y otros como parte de un esfuerzo para proteger a las águilas arpías en las áreas más vulnerables a la deforestación.FOTOGRAFÍA DE KARINE AIGNER
En una hoja de la Estación Científica La Selva en Costa Rica, avispas parásitas en estado de pupa, entre larva y adulto, se agrupan sobre la oruga moribunda que las alimentaba y cuya población mantienen bajo control. «La disminución de las avispas parásitas es catastrófica para cualquier ecosistema terrestre», dice el ecólogo Lee Dyer. El sitio ha perdido muchas especies de ambos tipos de organismos.FOTOGRAFÍA DE DAVID LIITTSCHWAGER, NATIONAL GEOGRAPHIC
Antes de salir al mar para cazar durante dos meses, un pingüino emperador hembra ayuda a su pareja a transferir el huevo a sus patas. La delicada rutina debe ser rápida o el huevo podría congelarse. Las aves no voladoras dependen de las plataformas de hielo marino congelado de la Antártida para encontrar pareja, aparearse y criar a sus polluelos. Pero a medida que aumentan las temperaturas, las plataformas desaparecen.FOTOGRAFÍA DE STEFAN CHRISTMANN
Una cámara trampa captura a un viejo leopardo de las nieves en una montaña que domina el valle de Spiti en el Himalaya. El fotógrafo Prasenjeet Yadav observó a este felino durante dos años hasta que murió en marzo al precipitarse desde un barranco mientras perseguía un íbice.FOTOGRAFÍA DE PRASENJEET YADAV, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un pingüino de Magallanes parece imperturbable ante el paso de una manada de guanacos en la reserva Punta Tombo en la costa atlántica de Argentina. El grupo Tompkins Conservation, propiedad de una pareja adinerada, está trabajando para comprar millones de hectáreas de tierra en Chile y Argentina y luego donarlos para crear nuevos parques.FOTOGRAFÍA DE TOMÁS MUNITA, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un bisonte se revuelca en el polvo en la Reserva de Praderas Estadounidenses, un proyecto de conservación que tiene como objetivo crear una inmensa área protegida en el centro de Montana. Los bisontes casi se extinguieron a fines del siglo XIX. Su reintroducción es una parte fundamental y controvertida del plan de la reserva para regenerar una gran franja de las llanuras del norte, retirar el ganado, restablecer la vegetación nativa y ayudar a que la vida silvestre perdida regrese y prospere.FOTOGRAFÍA DE AMY TOENSING, NATIONAL GEOGRAPHIC
Moviendo su lengua, una víbora de arbustos olfatea sus alrededores. Las serpientes venenosas matan a unas 30.000 personas en el África subsahariana cada año, pero muchas muertes no se registran. El número real puede ser el doble.FOTOGRAFÍA DE THOMAS NICOLON
En una granja de avestruces en Alemania, un polluelo se esconde entre las enormes patas de uno de sus padres. En el siglo XIX, las plumas de avestruz se pusieron tan de moda en Europa que la caza mermó las poblaciones de las aves en gran parte de su área de distribución. Se domesticaron en Sudáfrica en la década de 1860 y ahora los crían en todo el mundo por sus plumas, carne y cuero.FOTOGRAFÍA DE KLAUS NIGGE
Un chimpancé de laboratorio retirado busca comida en vasos apilados fijados al exterior de un recinto en Project Chimps, uno de los santuarios de chimpancés más nuevos y más grandes de los EE. UU. El refugio ubicado en Georgia ha acogido a 80 chimpancés desde su apertura en 2014, pero más de 20 ex empleados y voluntarios dijeron a National Geographic que Project Chimps está plagado de problemas.FOTOGRAFÍA DE GREG KAHN, NATIONAL GEOGRAPHIC
Un jurel juvenil y una medusa se mezclan en las profundidades del mar frente a la costa de Filipinas. Los fotógrafos David Doubilet y Jennifer Hayes capturaron esta fotografía mientras buceaban en las profundidades del mar por la noche. Doubilet y Hayes comparan nadar en el mar nocturno con flotar en el espacio. «La única forma de saber qué está arriba y qué está abajo es ver en qué dirección viajan las burbujas», afirma Doubilet.FOTOGRAFÍA DE DAVID DOUBILET AND JENNIFER HAYES, NATIONAL GEOGRAPHIC
Decenas de zorros voladores de cabeza gris se agrupan para intentar sobrevivir a las temperaturas de 43 grados en el parque de Yarra Bend, a las afueras de Melbourne, a finales de diciembre de 2019. Unos 4500 zorros voladores, entre ellos muchos de los de la foto, fallecieron a lo largo de tres días en el parque.FOTOGRAFÍA DE DOUG GIMESY
Un carruaje, uno de los 200 que hay en la ciudad de Nueva York, espera en Clinton Park Stables de Manhattan con su dueño, Ariel Fintzi. La industria histórica ha estado durante mucho tiempo en el centro de un intenso debate sobre si los carruajes urbanos son perjudiciales para los caballos.FOTOGRAFÍA DE DANIEL ROLIDER
