La sequía en México ha ocasionado que cerca de 60 presas en el norte y centro del país tengan pérdidas dramáticas en su volumen de agua, según NASA.
México se enfrenta a una de las sequías más severas que se han visto en décadas. Como el país latinoamericano que está resintiendo más las alzas en las temperaturas globales, la escasez de agua se extiende a lo largo de todo el territorio, durante una de las primaveras más cálidas registradas en la historia. Desde el espacio, ésta es la visión de NASA sobre el problema.
Sequía en México: así se ve el problema desde el espacio
A principios de abril, Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, alertó a la población capitalina sobre la grave sequía (la peor en tres décadas) que ha provocado mínimos históricos en el Sistema Cutzamala. La mandataria instó enérgicamente a la población para mantener los cuidados necesarios en el uso de agua.
La sequía en México, sin embargo, no se reduce a la capital. Por el contrario, el país experimenta uno de los momentos de escasez de agua más graves en su historia. Durante la segunda semana de abril, se registró el problema en un 85 % de todo el territorio, de acuerdo con las observaciones de NASA.
Las imágenes presentadas para el estudio fueron emitidas por el Generador operacional de imágenes de Tierra (OLI, por sus siglas en inglés). En ellas, se muestra claramente cómo la Presa Victoria, uno de los suministros de agua de la capital, se ha reducido significativamente en tan sólo un año. En la primera fotografía, se observa el cuerpo de agua sin nubes. En la segunda, aunque aparecen algunas, se nota la reducción dramática en el volumen de la presa.
Las presas mexicanas están en crisis
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), el 2020 fue un año particularmente seco. La sequía en México, sin embargo, se ha extendido hasta el primer trimestre de 2021, con lluvias escasas y crecientes problemas de desabasto en todo el país.
Según los datos de la NASA, al menos 60 presas grandes en el norte y centro del país están por debajo del 25 % de su capacidad habitual. Por esta razón, las autoridades locales han tenido que racionar el suministro a la población desde los embalses. Estas medidas ha producido que algunos habitantes se queden sin agua al abrir la llave.
No sólo las poblaciones humanas padecen de esta falta de agua. Por el contrario, la vegetación nacional está estresada también, de acuerdo con los datos recopilados sobre Índice de Estrés Evaporativo (ESI, por sus siglas en inglés). En ellos, se observa cómo se ha evaporado el agua de la superficie terrestre y de las hojas de las plantas.
Hoy, los valores están por debajo de las tasas normales, lo que indica que las plantas padecen por la falta de humedad en el suelo. Por el momento, las autoridades mexicanas discuten qué se hará en los próximos meses al respecto, esperando que las lluvias puedan volver para traer alivio al país.