El patrimonio de los países que cargan una historia de colonialismo se ha desperdigado entre museos europeos y colecciones privadas. México no es excepción. Durante más de tres siglos, cientos de miles de piezas prehispánicas han sido usurpadas en favor de instituciones que conservan esa sombra colonialista.
Recientemente, una familia radicada en Barcelona decidió tomar un rumbo distinto. Por voluntad propia, entregó al gobierno de México un tesoro precolombino de 2 mil 522 piezas, de las cuales, «mil 371 están relativamente completas«, reporta la AFP. Las secretarías de Cultura y de Relaciones de Exteriores del país celebraron la repatriación de los bienes, que se considera un logro a la campaña #MiPatrimonioNoSeVende.
Volver a casa
Este año, uno de los ejes de acción principales del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en México es continuar con los esfuerzos de recuperación de piezas prehispánicas robadas o compradas ilícitamente por coleccionistas. Los esfuerzos se han alineado al programa estatal #MiPatrimonioNoSeVende.
De acuerdo con la Secretaría de Cultura, el objetivo primordial de esta campaña es «proteger y recuperar el patrimonio cultural de los mexicanos», según dice en su cuenta oficial de Twitter. Sobre todo, de aquellas instituciones privadas que los adquirieron de manera ilegal.
Sobre el caso del tesoro precolombino que el gobierno mexicano repatrió este verano, el INAH destaca que la devolución fue voluntaria, y describe la entrega como una de las más grandes hasta ahora:
«[…] la entrega voluntaria de dos mil 522 piezas y objetos patrimoniales restituidos a México desde Barcelona, España, y la cual es considerada, hasta ahora, la más cuantiosa hecha a nuestro país», escribe la institución en un comunicado.
La única petición que hizo la familia barcelonesa fue que su nombre no fuera revelado públicamente, apuntó el canciller Marcelo Ebrard en una conferencia oficial. Las piezas prehispánicas ya llegaron a México. Ahora, el INAH se encargará de catalogarlas y evaluarlas.
¿Qué incluye el tesoro que regresó a México?
Según las autoridades mexicanas, entre las piezas prehispánicas recuperadas, «destacan figuras talladas en piedra, puntas de flecha, platones y vasijas». Esta colección se suma a las más de 8 mil 900 piezas que la campaña #MiPatrimonioNoSeVende ha recabado desde 2018.
Hasta ahora, los arqueólogos que lideran el proyecto aseguran que son «objetos mexicas del periodo Posclásico Tardío (1200-1521 d.C.), incluye elementos que se remontan al Preclásico (2500 a.C.-200 d.C.), a la época virreinal temprana e, incluso, a temporalidades más recientes.
El INAH anunció recientemente que, una vez que terminen los procesos de evaluación, la colección estará expuesta en el Templo Mayor, en el Centro Histórico de la ciudad de México. Patricia Ledezma, directora del sitio arqueológico, destacó que «nos emocionamos mucho porque hay piezas muy importantes, muy interesantes«.
Generalmente, las casas de subastas y coleccionistas privados exigen al gobierno de México que compruebe que las piezas le pertenecen. La respuesta de las autoridades, dice Marcelo Ebrard, es que estas instituciones privadas «deben demostrar el origen legal» de las piezas que quieren mantener en su poder.
Algunos ciudadanos de otros países europeos deciden devolver el patrimonio de manera voluntaria. Es común que los procesos se estanquen en el vaivén burocrático.
