En Tampico, Madero y Altamira también falta humedad pero no se llega a esa condición, de acuerdo con la Conagua
Tamaulipas aún tiene cinco municipios con sequía, pese a que la temporada más propicia para esa problemática ya pasó. Se trata de Nuevo Laredo, Camargo, Mier, Miguel Alemán y Guerrero.
El Monitor de Sequía en México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó en su último reporte con corte a la segunda quincena de octubre que se registraron lluvias por arriba del promedio en cinco estados y algunas regiones aisladas de Tamaulipas, Colima, Durango, Zacatecas y Campeche.
Sin embargo, también hubo precipitaciones por debajo del promedio que se concentraron en diversas regiones, entre estas la costa este de Tamaulipas y el norte de Veracruz.
Los déficits de precipitación fueron consecuencia de la falta de desarrollo ciclónico en la cuenca del Atlántico en la última quincena del mes. Las condiciones anormalmente secas se extendieron en Tamaulipas, Sonora y la Península de Yucatán.
En el estado, 24 de 43 municipios están en condición anormalmente seca, dos tienen sequía moderada (Camargo y Nuevo Laredo) y 3 sequía severa (Mier, Miguel Alemán y Guerrero).
Anormalmente secos se encuentran Tampico, Madero, Altamira, Abasolo, Aldama, Burgos, Casas, Cruillas, González, Güémez, Díaz Ordaz, Hidalgo, Jiménez, Mainero, Mante, Matamoros, Valle Hermoso, Padilla, Reynosa, Río Bravo, San Carlos, San Fernando, Soto La Marina y Villagrán.
Cabe hacer mención que, la Comisión Nacional del Agua no considera sequía a la característica “anormalmente seco”, de ahí que solo incluye cinco municipios en aquel panorama.
En algunos municipios, esta sequedad puede ocasionar el retraso de la siembra de los cultivos anuales, un limitado crecimiento de los mismos o no recuperarse fácilmente; en otros persiste el déficit de agua.
Cuando hay sequía moderada, se presentan algunos daños en los cultivos y pastos; existe riesgo de incendios, bajos niveles en ríos, arroyos, embalses, abrevaderos y pozos y se sugiere restricción voluntaria en el uso de agua.
Sequía severa, implica pérdidas en cultivos o pastos, alto riesgo de incendios y es común la escasez de agua, por lo que se deben imponer restricciones en el uso de este recurso vital.
