De acuerdo con un estudio de la Universidad de Washington, publicado en Communications Earth & Environment, limitar el calentamiento global a dos grados por encima de los niveles preindustriales exige reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 80% más a las planteadas en el Acuerdo de París.
Dicho estudio, señala que esto equivale a una caída promedio de las emisiones del 1.8% anual en lugar del 1% establecido en el marco internacional vigente contra el cambio climático.
Adrian Raftery, autor principal del estudio y profesor de estadística en la Universidad de Washington, dijo a Europa Press:
“Varias personas han dicho, particularmente en los últimos años, que los objetivos de emisiones deben ser más ambiciosos (…) Fuimos más allá para preguntar de una manera más precisa: ¿Cuánto más ambiciosos necesitan ser?”.
Para este estudio, los investigadores utilizaron un enfoque estadístico para modelar los tres principales impulsores de los gases de efecto invernadero producidos por el hombre. Dicho impulsores son: la población nacional, el producto interno bruto por persona y la cantidad de carbono emitido por cada dólar de actividad económica, conocido como intensidad de carbono.
Además, utiliza un modelo estadístico para mostrar el rango de resultados futuros probables basados en datos y proyecciones hasta el momento.
Los investigadores consideran que incluso con métodos actualizados y cinco años más de datos, que ahora abarcan desde 1960 hasta 2015, cumplir los objetivos del Acuerdo de París daría solo un 5% de probabilidad de mantenerse por debajo de los 2 grados Celsius de calentamiento.
Por ello, para los expertos, aumentar los objetivos generales para reducir las emisiones de carbono en un promedio de 1.8% y continuar por ese camino luego de que el Acuerdo de París expire en 2030, le daría al planeta un 50% de posibilidades de mantenerse debajo de los 2 grados de calentamiento global para 2100.
“A nivel mundial, el objetivo de temperatura requiere un aumento del 80% en la tasa anual de disminución de emisiones en comparación con el Acuerdo de París, pero si un país ha terminado la mayoría de las medidas de mitigación prometidas, entonces la disminución adicional requerida ahora será menor”, dijo Peiran Liu, autor del estudio.
El estudio también analiza las implicaciones de este plan general en los compromisos adquiridos por los diferentes países en el Acuerdo de París.
Estados Unidos prometió una caída del 1% en las emisiones de carbono por año hasta 2026. Por su parte, China se comprometió a reducir su intensidad de carbono en un 60% de 2005 a 2030.
Pensando en un escenario en el que cada país mantenga su compromiso, EE.UU tendría que aumentar su objetivo en un 38%, y en el caso de China, un 7%. Para el caso de Reino Unido, requeriría aumentar la meta en un 17%. En el caso de Corea del Sur y Brasil, países que han aumentado sus emisiones más que reducirlas, necesitarían un impulso mayor para compensar el incremento.
Finalmente, los autores sugieres que los países deben aumenta su responsabilidad ambiental. Esto, a partir de revisar anualmente sus progresos y no en periodos de cinco, diez o más años.
“Hasta cierto punto, el discurso sobre el clima ha sido: ‘Tenemos que cambiar completamente nuestros estilos de vida y todo. La idea de nuestro trabajo es que, en realidad, lo que se requiere no es fácil, pero es cuantificable. Reducir las emisiones globales en un 1,8% por año es un objetivo que no es astronómico”, concluyó Raftery.