Te contamos cómo es el proceso por el cual el magma del interior de la Tierra erupciona en la superficie.
Los volcanes son estructuras geológicas a través de las cuales el magma del interior de la Tierra asciende a la superficie. Se suelen originar como consecuencia del movimiento de las placas tectónicas, aunque hay excepciones, como los volcanes de Hawái, que surgen en puntos calientes, esto es, en zonas en las que existen plumas de magma.
Para entender a la perfección el origen de los volcanes es necesario entender cómo es nuestro planeta. El planeta Tierra se divide en varias capas desde el núcleo a la superficie. Entre estas capas se encuentra la corteza terrestre, capa que comienza en la superficie, llega hasta los 70 km de profundidad y está formada por rocas. La corteza no es uniforme, sino que está agrietada por distintas partes, dando lugar a lo que conocemos como placas tectónicas. Como hemos dicho antes, cuando las placas tectónicas se mueven provocan erupciones volcánicas. Estas erupciones pueden ser bien terrestres o bien submarinas.
Las placas tectónicas pueden moverse de diversas maneras, originando distintos tipos de volcanes, además de terremotos. Si una placa oceánica (con más densidad) pasa por debajo de una continental (más fina), se derretirá parcialmente debido a las altas temperaturas del interior de la Tierra. El magma o material derretido llegará a la superficie del cráter y erupcionará como lava, gas o elementos sólidos. A este tipo de volcanes se les llama volcanes de límites continentales. Los volcanes de dorsales oceánicas son aquellos que se originan como consecuencia de un movimiento de separación de las placas tectónicas. Al separarse, se crea una abertura por la que emergerá el magma. Por último, los volcanes de punto caliente son los que se originan en áreas volcánicas formadas por plumas de manto, es decir, por material caliente y fundido que asciende procedente del manto de la Tierra.
Las etapas en la formación de un volcán serían, a grandes rasgos, las siguientes:
– El magma se forma en el interior de la Tierra, donde existen unas temperaturas muy elevadas.
– El magma asciende a la parte superior de la corteza terrestre.
– El magma sale a través de las grietas existentes en la corteza y por el cráter principal en forma de erupción.
– Los fragmentos sólidos de material volcánico (piroclastos) se depositan en la superficie de la corteza y van formando el cono volcánico principal.
¿Y dónde se encuentran los volcanes? Existen cinco principales zonas volcánicas:
– La zona volcánica Circumpacífica. Es la correspondiente al Cinturón de Fuego del Pacífico y comprende los siguientes países: Chile, Ecuador, Perú, Colombia, Centroamérica, México, Bolivia, Argentina, EEUU, Canadá, Rusia, Taiwán, Japón, Indonesia, Filipinas, Nueva Guinea y Nueva Zelanda.
– La zona volcánica Mediterránea-Asiática. Abarca desde el Atlántico al Pacífico. Incluye Italia y la zona sureste de España (Almería y Murcia, por ejemplo).
– La zona volcánica Índica. Rodea el Índico hasta llegar a la zona volcánica Circumpacífica.
– La zona volcánica Africana. Va desde Mozambique hasta Turquía.
– La zona volcánica Atlántica. Se extiende a lo largo del centro del océano Atlántico (Canarias, por ejemplo).