Los restos del calamar gigante (Architeuthis dux) llamaron la atención de varios turistas. El cuerpo estaba semienterrado en la arena.
Pasear por una playa de Nueva Zelanda y de pronto encontrar el cadáver de un calamar gigante (Architeuthis dux) no es algo que pase todos los días. Anton Donaldson, guía de turistas, se topó con uno en la playa de Farewell Spit.
“No es un hallazgo común en ninguna playa, así que si puedes estar allí en el momento adecuado, es una oportunidad única en la vida”, dijo Donaldson.
Los restos estaban semienterrados en la arena. Al verlos, el guía alertó a un grupo de turistas cercano para que acudiera a echar un vistazo. El grupo se dedicó a observar y sacar fotografías de los restos.
El calamar gigante se caracteriza por ser una de las especies más esquivas del mundo marino y también una de las más grandes. Sólo la supera en tamaño el calamar colosal (Mesonychoteuthis hamiltoni), que puede medir hasta 13 metros de largo.
Estos grandes cefalópodos, que se cree que son la inspiración real de la enorme criatura marina mitológica conocida como “kraken”, viven en aguas profundas a más de 900 metros de profundidad y rara vez se ven en la naturaleza.
Cuál fue la causa de muerte del calamar gigante
Hasta el momento no se sabe a ciencia cierta la causa de muerte del animal. El cuerpo estaba semidevorado probablemente por “pequeños tiburones o peces”, dijo Donaldson. “Aunque no lo sé con certeza, imagino que había estado flotando ahí fuera durante un tiempo y había aparecido”.
La empresa turística Farewell Spit Tours informó al Departamento de Conservación de Nueva Zelanda sobre el calamar, y es probable que la agencia intente recuperar los restos para estudiarlos, según The New Zealand Herald.
No es la primera vez que se encuentran restos de calamares gigantes en las costas de Farewell Spit. Al menos seis han aparecido en las playas de la reserva natural en los últimos 30 años, según un representante de Farewell Spit Tours.
Los calamares gigantes habitan en todos los océanos, a excepción de las zonas árticas y tropicales, y son especialmente abundantes en las aguas de Japón.
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Al ser animales que hacen su vida en las profundidades de los mares, no se acercan a la superficie o a las costas; por ello sus avistamientos son una verdadera rareza. Cuando se les captura suelen encontrarse en mal estado, moribundos o muertos.
Estos calamares se alimentan de peces, pequeños crustáceos y también de otros calamares. A pesar de poseer ocho tentáculos, solo utilizan dos de ellos para capturar a sus presas.
Se sabe que los cachalotes son uno de sus depredadores, pues se han hallado picos de calamares gigantes en sus estómagos. Además, muchos calamares gigantes aparecen con marcas de ventosas y cicatrices, lo que manifiesta que ambos libran intensas luchas en el fondo del mar.