Ante las perturbaciones ambientales, como el aumento de la temperatura o la disminución de la humedad, los seres vivos reaccionamos cambiando nuestros hábitos de vida, nuestra alimentación y nuestros rasgos morfológicos.
La ecología funcional estudia los atributos que cambian ante las variaciones ambientales o que tienen importancia ecológica, es decir, que influyen en el hábitat y el funcionamiento de los ecosistemas.
En un nuevo estudio, se han recopilado los datos que se conocen sobre los escarabajos del estiércol, que incluyen a los famosos escarabajos peloteros, para determinar qué atributos de las especies influyen sobre los ecosistemas cuando cambian.
Los escarabajos peloteros son los recicladores de la naturaleza por excelencia e influyen en muchos procesos de los ecosistemas, estos animales como el resto de seres vivos, pueden cambiar su comportamiento.
Los rasgos o atributos de importancia ecológica son aquellos que al modificarse cambian o la salud o el éxito reproductivo de individuos o especies, o provocan cambios en los ciclos biogeoquímicos del ecosistema, como la captación de carbono o la composición del suelo.
Estos animales muestran respuestas diversas ante la variación de temperatura, agua, propiedades del suelo, recursos tróficos, luz, estructura de la vegetación, competencia, depredación y parasitismo.