Si existe un mamífero con mala fama es la hiena es tachada de cobarde, carroñera y fea, pero en realidad son animales fascinantes.
Aunque tienen fama de carroñeras, las hienas son unas expertas cazadoras en manada. Se estima que hasta el 70% de su dieta está compuesta por capturas propias.
Aunque se asemejan más a los perros, en realidad las hienas están emparentadas con los gatos, pues pertenecen al suborden de los feliformes, que, junto con las hienas, engloba a los félidos, las mangostas y las civetas.
Las patas delanteras de las hienas son más largas que las traseras, además, la columna vertebral aparece inclinada hacia la cola, lo que acrecienta esa sensación óptica.
Las hienas forman una sociedad matriarcal en la que las hembras a menudo forman coaliciones fuertes y protectoras con sus hijas, las cuales refuerzan el matriarcado de generación en generación.
El área de distribución varía en función de la especie, la de la hiena rayada, por ejemplo, va desde Oriente Medio hasta el sur de Asia, aunque los otros miembros de la familia se limitan al continente africano.
