El deshielo provocado por la crisis climática global está modificando las excursiones de senderismo, explica la alpinista Viridiana Álvarez.
En el Iztaccíhuatl y el Himalaya, la alpinista mexicana Viridiana Álvarez encontró un mismo problema: los glaciares están perdiendo su vigor. No sólo el deshielo le inquieta. Hay ocasiones en las que las estaciones ya no se manifiestan de la misma manera, o paisajes que se han visto completamente modificados a raíz de la crisis climática global.
El problema, naturalmente, no se centra en las personas que realizan expediciones de senderismo en parques nacionales, o en quienes se dedican a escalar montañas. Por el contrario, desde su punto de vista, la raíz está en la agenda industrial que promueve la emisión de gases de efecto invernadero. «Se está viendo mucho cambio», explica la exploradora mexicana en una entrevista exclusiva con National Geographic Traveler. Éstas pueden ser las implicaciones para el senderismo global.
Las nuevas perlas sobre los volcanes
Viridiana Álvarez dice que se encontró a sí misma en la montaña. Después de una década como alpinista, es consciente de que las expediciones pueden tener un impacto ecológico en el ecosistema de las montañas. Por ejemplo: la última vez que ascendió al Pico de Orizaba, en Veracruz, se encontró con envases de refresco y vasos desechables en las faldas del volcán:
«ÉSTA ÚLTIMA VEZ QUE FUI [AL PICO DE ORIZABA], ME ENCONTRÉ CON VASO DE UNA PERSONA QUE SEGURAMENTE SÓLO FUE A CAMINAR A LOS ALREDEDORES», SE LAMENTA LA EXPLORADORA. «HASTA LE TOMÉ FOTO, PORQUE TENÍA TODAVÍA EL NOMBRE«.
En 2020, Gaceta UNAM sugería que todavía era posible detener el deshielo de los glaciares mexicanos. En ese entonces, ‘El Goyo’, que corresponde a la cumbre del Citlaltépetl, todavía se revestía de una capa tupida de nieve a lo largo del año. A lo lejos, quienes la recordamos en su esplendor sabemos que podía verse perlada.
Apenas dos años después, el glaciar del volcán fue declarado extinto por la misma institución. Entre la basura que dejan los visitantes y alpinistas aficionados, podría ser que las nuevas perlas de los volcanes sean vasos en desuso y latas de refresco abandonadas.
Más allá de la recolección de basura
Como alpinista, Viridiana Álvarez se lamenta que las personas que visitan estos espacios naturales no puedan bajar la basura que desechan en las montañas. Por ello, en algunas de sus expediciones a los picos más altos de México lleva consigo bolsas para recolectar basura. Especialmente, cuando niños pequeños participan.
Más allá de generar consciencia en las generaciones más jóvenes, la alpinista reconoce que el impacto de estas acciones es mínimo en comparación al daño ecológico de la crisis climática global. «Hay veces que todavía no es temporada para que estén deshelándose», explica sobre su experiencia. Sin embargo, el pico está completamente desprovisto de nieve.
Incluso, las fechas de las expediciones han tenido que modificarse a como estaban agendas originalmente. Más que nada, porque el mismo ritmo acelerado del deshielo puede ser peligroso para los exploradores.
«Es triste, porque no hay una acción concreta que podamos juntarnos y hacer«, dice Álvarez. Con respecto a los glaciares que ha visto en persona, lamenta que sus hijos «sólo podrán verlos a través de fotografías«.
