Tierra

¿Es bueno que regrese la naturaleza salvaje?

El rewilding  es un proceso, a veces espontáneo y a veces premeditado, en el que se recupera la funcionalidad y la biodiversidad de los ecosistemas.

Este concepto aterrizó hace ya al menos una década en otros países del mundo, como Argentina y EE. UU., pero en España ha empezado a ganar popularidad muy recientemente, incluso entre el público no especializado.

Más allá de sus aportaciones ecológicas, la vuelta de la naturaleza genera una serie de beneficios sobre la salud y el desarrollo de las personas y de los animales salvajes.

Se ha investigado cómo el reverdecimiento de los espacios urbanos puede atenuar el calor acentuado por la pavimentación y por el cambio climático, cómo puede causar una mejora psicosocial y cómo vivir cerca de zonas asilvestradas y más robustece al sistema inmunológico.

La resilvestración, además, puede ser una herramienta contra la despoblación rural, porque puede atraer la expectación por observar a la fauna silvestre y puede recuperar puestos de trabajo como el ecoturismo.

La renaturalización abraza una perspectiva sistémica, preocupada por garantizar la riqueza de los ecosistemas, y no solo por la vida individual de cada uno de sus integrantes, puede conducir a que se favorezca la vida de unas especies.

Esta puede generar tanto beneficios como perjuicios en diferentes contextos y bajo distintas ópticas morales, es importante reflexionar éticamente sobre él y facilitar espacios para una comunicación pública.

También puede gustarte...