Alrededor de 485,000 muertes en el mundo se atribuyen al consumo de agua insalubre durante el 2020, un número significativamente más alto de las muertes que se atribuyen a conflictos armados o guerras y a los desastres naturales.
El acceso efectivo al agua apta para beber todavía no es un derecho universal, en el mundo hay cerca de 772 millones de personas que todavía enfrentan obstáculos para acceder a agua potable, según cifras de la ONU. Y cerca de 2,000 millones ni siquiera tienen acceso a este líquido para fines domésticos.
La contaminación del agua puede causar enfermedades como cólera, tifoidea y hepatitis tipo A; casi medio millón de personas murieron en 2020 a causa del agua insalubre.
