Encerrando al Sol en un círculo perfecto, un trazo pálido se formó en el cielo la tarde del 6 de junio de 2022 en la Ciudad de México. Miles de capitalinos compartieron su asombro en redes sociales, discutiendo las posibles causas de este fenómeno atmosférico misterioso.
Visible en todo el centro del país —en los estados de Hidalgo, Puebla, Estado de México y la capital—, el halo solar es producto de la interacción del hielo con la luz. Aquí te explicamos cómo se forma, cuál es su origen y por qué aparece en la bóveda celeste.
¿Qué es un halo solar y qué significa?
Para la NASA, la aparición de este halo solar no es ningún misterio. Por el contrario, según las observaciones de la agencia espacial, es producto de la interacción de partículas de agua congelada en la atmósfera:
«Creados por cristales de hielo orientados al azar en cirros altos y delgados, los halos circulares de 22 grados son visibles con mucha más frecuencia que los arcoíris», explica en su portal oficial.
Muchas veces, estos cristales se forman a más de 10 kilómetros de la superficie terrestre. De hecho, en las latitudes más septentrionales del planeta, durante el solsticio de diciembre se llegan a formar varios halos solares concéntricos. Especialmente, en el Polo Norte.
«Todos los patrones se generan a medida que la luz del sol (o la luz de la luna) se refleja y refracta en cristales planos de hielo de agua de seis lados en la atmósfera de la Tierra», documenta la agencia. Aunque algunas culturas le atribuyen significados espirituales a este tipo de eventos atmosféricos, no existe evidencia científica que sustente su influencia en la vida o el destino de las personas.
¿Qué pasa cuando aparece un aro alrededor del Sol?
No todos los halos solares se ven con la misma claridad. De hecho, en algunas ocasiones, según la posición del Sol y las condiciones atmosféricas, apenas y se percibe desde la superficie terrestre. En otras, sin embargo, se puede apreciar una especie de arcoíris que rodea perfectamente al astro.
Generalmente, además, depende de la concentración de nubes cirrostratus nebulosus. Según la Organización Meteorológica Mundial, éstas son las principales responsables de la aparición de halos solares en las alturas. Visto de otra manera, las partículas de hielo en la atmósfera sirven como millones prismas minúsculos que, en conjunto, refractan la luz y generan colores en el cielo.
