Guardacostas chinos rescataron a nueve ballenas que habían quedado varadas en aguas costeras frente a la provincia de Zhejiang, en el este del país, pero no pudieron impedir la muerte de otras tres.
os equipos de rescate se desplazaron en la mañana del martes a una playa en la ciudad de Linhai de la mencionada provincia tras recibir un aviso de que se había avistado a doce ballenas varadas, según la agencia estatal Xinhua.
Sin embargo, el calor, su peso y su ubicación, lejos de la orilla, complicaron las tareas para devolverlas al agua, y tres de los cetáceos fallecieron antes de que llegaran los equipos de rescate.
Se trata, según la agencia, de doce delfines de cabeza de melón, un tipo de ballena de hasta unos tres metros de largo y 200 kilos de peso que suele habitar océanos tropicales y subtropicales.
150 personas participaron en el rescate
Unas 150 personas participaron en el rescate, durante el cual se cavaron agujeros alrededor de los mamíferos marinos y se vertió agua sobre ellos para evitar que se ahogaran con el barro.
También usaron toallas mojadas para mantenerlas húmedas y levantaron cobertizos para protegerlos del sol, detalló a la cadena estatal CCTV un funcionario local.
Después de casi 10 horas, los equipos lograron salvar a las nueve ballenas restantes y las transportaron a un lugar seguro.
Las autoridades enviaron a dos de las ballenas rescatadas a un acuario, a otras dos a un parque costero y las cinco restantes a una empresa local de cría de animales marinos, detalla Xinhua.
Las ballenas y otros animales marinos como los cachalotes o los delfines quedan varados en ocasiones en costas debido a problemas de salud que afectan a su sistema de orientación, aunque también pueden influir factores externos como la contaminación, anomalías en las mareas o cambios en los campos magnéticos de la zona.