Cómo es una avispa alfarera
Las avispas alfareras son una subfamilia de avispas conocidas como eumeninos (Eumeninae). Existen varios tipos de avispas alfareras, de hecho, se trata de un grupo grande y cosmopolita que abarca unos 200 géneros. Muchas de ellas son especias invasoras de origen asiático que se han expandido a gran velocidad por territorios que antes no habitaba en escasos años. Su dispersión geográfica ha sido altamente influenciada por el ser humano, siendo su distribución común la India, Nepal, Pakistán, Kazajstán y Tayikistán, así como Himalaya y Karakorum. Sin embargo, hasta el momento, no representan una amenaza grave ya que no se han detectado efectos considerados de este insecto sobre los nuevos ecosistemas colonizados o a su biodiversidad.
En cuanto a algunas de las características de la avispa alfarera,
- Su tamaño es más bien grande pudiendo llegar a unos 17 mm.
- Tiene un cuerpo de coloración negra y manchado con unas franjas amarillas en la parte inicial y final del tórax, y en el abdomen.
- Se caracterizan también por se avispas solitarias, a diferencia del comportamiento social que suelen presentar otras familias de avispas.
- Respecto a cuánto vive una avispa alfarera, de adultos, los machos tienen una longevidad únicamente tres o cuatro semanas, mientras que las hembras pueden alcanzar los dos o tres meses.
- La reproducción de la avispa alfarera se basa en poner huevos. Las hembras invierten todo su tiempo de vida en construir nidos para poner sus huevos. Los huevos de avispa alfarera son adheridos por la hembra en el techo del nido a través de un filamento que secretan. Cuando finaliza la construcción de un nido, caza arañas y las aturde con su veneno. Luego las introduce al nido y procede con la puesta de huevos para luego taponar el nido con barro. De esta manera, cuando la larva nace se come las arañas que previamente le ha dejado su madre. También puede darse que se inicie la captura de presas una vez puesto el huevo. En todo caso, las presas capturadas serán el alimento de las crías durante el otoño y el invierno. Entonces, después de convertirse en crisálida, se convierte en avispa y entonces ya tiene la capacidad de romper el nido y abandonarlo.
Cómo es el nido de la avispa alfarera
Los nidos de las avispas alfareras son bastante peculiares. La mayoría de ellas construyen nidos en forma de ánfora romana, de ahí el nombre común de avispa alfarera, elaborados moldeando el barro y combinado con su propia salvia que usa como cemento.
A través del uso de sus patas, la avispa comprueba que la pared tenga un grosor uniforme. Finalmente, cierran la construcción con una embocadura estrecha a modo de labio. Suelen ser de color marrón claro u oscuro y presentan una longitud de 25 mm. Sus sitios preferidos para construir estos nidos con áreas con sombra y resguardadas. Y es que estas avispas son de los pocos insectos que hacen nidos de barro.
También existen otras avispas que usan cavidades en el suelo o aprovechan nidos que han sido abandonados por otras avispas u otros insectos similares. Además, pueden usar partes de las plantas para hacer sus nidos o para convertirlos directamente en estos.
Cómo es la picadura de la avispa alfarera
Las picaduras de las avispas alfareras suelen ser leves, en comparación con otras avispas, como la avispa asiática, de la que puede aprender todo en este enlace. En vez de provocar la muerte a sus presas, el veneno inoculado las paraliza. En cuanto al ser humano, la avispa alfarera no provoca un efecto potente: induce una inflamación en el área donde ha picado y causa cierto dolor, parecido al que produce la picadura de la avispa común.
Si se mantienen distancias y no son molestadas, no tendría que haber peligro de ser picado. No obstante, el riesgo a ser picado viene provocado por la aproximación a su territorio, de manera que su preferencia por construir nidos cerca de las casas puede causar situaciones accidentales.
Qué pasa si te pica una avispa alfarera
Para aliviar la picadura de la avispa alfarera, basta con colocar hielo sobre la zona de la picadura o toallas frías para rebajar la hinchazón y calmar el dolor. En caso de que el aguijón se haya introducido totalmente en la piel y se haya quedado, se recomienda proceder con su eliminación en cuanto antes para evitar una herida mayor e infecciones.
No obstante, en caso de ser alérgico a las picaduras de avispas, la situación se puede complicar significativamente, y es entonces necesario el uso de antihistamínicos y la visita a un médico por si la reacción alérgica pudiera llegar a shock anafiláctico.
