“Revilla”, como coloquialmente lo conocemos los buzos, es un grupo de islas en el océano Pacífico. Este increíble ecosistema se compone de tres islas: Socorro, Clarión y San Benedicto; y un islote, Roca Partida. Para llegar al archipiélago se zarpa desde Los Cabos y a 390 kilómetros al suroeste la primera parada suele ser Isla San Benedicto”.
Un poco más al sur se encuentra la isla más grande y famosa: “Socorro”, de hecho, muchos buzos extranjeros así le llaman a todo el archipiélago. Al oeste, a unos 100 km, se localiza “Roca Partida” una singular formación de dos grandes piezas rocosas unidas por debajo, con grandes cañones que bajan a la profundidad del océano. Finalmente, a 250 km se encuentra “Clarión”. Dada su lejanía, son muy pocas las personas que han tenido la oportunidad de realizar inmersiones ahí.
La ubicación geográfica del archipiélago permite que sea un sitio ideal para la conectividad de especies pelágicas, tales como ballenas jorobadas, mantas, tiburones martillos, entre otras. En las islas, estas especies encuentran alimento y refugio, así como un lugar para el crecimiento y fortalecimiento de sus crías antes de retomar sus migraciones a otras latitudes. También encontramos residentes permanentes como tiburones punta blanca, galápagos, sedosos e incluso tigres; así como un sinnúmero de peces y los siempre mágicos delfines.
En el año 2016 la UNESCO le otorgó el rango de Patrimonio Natural de la Humanidad posicionándola como uno de los mejores lugares para bucear en el mundo.